Cuando Dios está en el centro de la pareja, todo funciona bien porque él no se equivoca, sabe perfectamente cuáles son los planes para nuestra vida y esos planes son de bien, no de mal.
No te preocupes por encontrar la pareja perfecta o esforzarte para tener un noviazgo o matrimonio de película. Confía en el Señor y deja que él tome el control de tu vida y tú relación; deja que él te guíe y te enseñe. Así tendrás una pareja mucho mejor de lo que esperabas porque no será a tu manera sino a la manera perfecta de Dios.
Aunque la sociedad diga que es imposible tener un amor para toda la vida, Dios puede hacerlo porque él es quién creó el matrimonio. El amor es el vínculo perfecto! ♥
